El diseño único de Houston genera un flujo de aire asimétrico de los lados convexos de la campana, recibiendo así un perfil ascendente forzado optimizado. Esto da lugar a una velocidad horizontal después de la apertura que crea una elevación y mejora significativamente la tasa de caída.
El piloto puede dirigir el paracaídas mediante el sistema de asas y puede evitar posibles obstáculos durante el descenso. Puede aproximarse con precisión a un campo de aterrizaje de emergencia con una tasa de planeo de aprox. 1:1,5.
Sin el uso de las asas de dirección el rescate funciona como cualquier otro paracaídas de rescate clásico. No hay desventajas para el HOUSTON en comparación con los paracaídas convencionales de forma cuadrada. El sistema de rescate HOUSTON se abre y funciona sin frenado previo y por lo tanto el sistema sigue siendo muy fácil de manejar y es fiable.
El embalaje del HOUSTON no requiere más tiempo ni es más complejo que el de un paracaídas cuadrado normal.
El HOUSTON 160 es adecuado para pilotos de mayor potencia. Carga máxima 160 kg con una tasa de caída de 4,8 m/s.
Inflado rápido
Gran estabilidad
Peso reducido
Baja velocidad de hundimiento
Dirigible pero funciona bien como no dirigible
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