Para poder albergar dos nuevos aviones, entre ellos un BAe146 de 26,2 m de envergadura y un Dassault Falcon 900 de 19,3 m de envergadura, se necesitaban nuevas puertas y una ampliación del hangar T2 del aeropuerto de Biggin Hill. De este modo, la altura de las puertas pasaría de 7,62 m a 9,25 m.
Hay 6 puertas en 3 carriles, lo que da una entrada de 34 m de ancho por 9,25 m de alto. Todas las puertas se accionan eléctricamente y pueden moverse independientemente unas de otras. Las puertas del hangar tienen un sistema de apertura y cierre a prueba de fallos que se acciona mediante una botonera. En caso de fallo eléctrico, los motores pueden desconectarse y simplemente empujarse.
Las puertas están aisladas con un revestimiento de paneles compuestos microrib y diseñadas para resistir vientos de 22 metros/segundo por hora.
La estructura de acero de la cubierta de la puerta se montó independientemente de la estructura de acero del hangar existente. REIDsteel montó el acero, instaló el revestimiento y cableó y puso en servicio las puertas eléctricas, al tiempo que mantenía el acceso al hangar para las instalaciones, etc.
La ventaja de esta ampliación es que el cliente puede alojar aviones más altos que los que la T2 original estaba diseñada para albergar.
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